En diciembre finaliza el convenio de dos años entre el Ayuntamiento de Collado Villalba y la Concesionaria Collado Villalba para la explotación municipal de los aparcamientos de Honorio Lozano y la Biblioteca. El acuerdo implicaba hacerse cargo del mantenimiento de ambas instalaciones a cambio de abrirlas de forma gratuita a los usuarios. La empresa se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento para recordarle que ambas instalaciones están en un lamentable estado de conservación.
La lista de desperfectos que denuncia la Concesionaria en un informe que ha remitido al Consistorio es larga, tal y como denunciaron en el Pleno los grupos municipales de IU y el PSOE. No es sólo la suciedad, las pintadas o los desperfectos en paredes y rampas. También hay maquinaria rota, faltan “hasta 430 luminarias”, leyó del informe el concejal de IU, Mariano Gómez durante el Pleno, “y todas las barreras están dobladas excepto una que ha desaparecido”. El problema, denuncian desde la oposición, es que según el convenio firmado hace dos años, si hay que devolver ambas instalaciones a la Concesionaria en diciembre hay que hacerlo en las mismas condiciones en las que fueron entregadas. “A lo mejor en diciembre quieren volver a tomar posesión de su propiedad y van a exigir al Ayuntamiento que ponga todo esto en estado correcto, como dice el convenio que se entregó”, recordó el portavoz del PSOE, Juan José Morales.
Desde el Ejecutivo aseguran que se realizan habitualmente las labores de mantenimiento del aparcamiento, aunque los actos vandálicos son inevitables. “Estamos atendiendo todas las llamadas del parking. Todas las notas que nos pasan, fluorescentes, pintadas, cristales… se procede a su reparación. Pero si reparamos y por la tarde vuelven a pintar...”, señalaba durante el Pleno el concejal de Obras, Carlos Sanz. “Tendremos que ir cuando podamos, porque tenemos otras prioridades en el municipio”.
Cuando se firmó el convenio del parking hace dos años, se anunció que se establecería un sistema de rotación por el que habría diferentes zonas para aparcar según el tiempo de estancia de los vehículos. Pero finalmente, la idea de crear un sistema de rotación se abandonó, se dejaron abiertas las barreras y no hay vigilancia sobre el tiempo que permanecen allí los vehículos.