El PSOE de Galapagar denuncia los desperfectos del Centro de Salud de la localidad

En la proposición del PSOE, que contó con el apoyo de Más Madrid y Galapagar Entre Todos y la abstención del PP y VOX, se asegura que “el Centro de Salud de Galapagar presenta un estado de deterioro alarmante, con desperfectos visibles en múltiples salas. Las malas condiciones en que se encuentra, suponen un riesgo sanitario real para los pacientes, el personal médico, de enfermería y de limpieza”.

“Las imágenes lo dicen todo. Humedades, goteras, moho, techos deteriorados, mobiliario roto, zonas inutilizadas y cubos en las salas de espera para recoger el agua. Esto no es una situación puntual: es el resultado de años de abandono por parte de la Comunidad de Madrid”, denunciaba en el Pleno la concejala socialista Pepa Álvarez.

Los socialistas denuncian “la falta de mantenimiento general, visible en todas las estancias, que no ha sido respondida ni con una supervisión activa ni con una exigencia contundente por parte del Consistorio hacia la Comunidad de Madrid”. Aseguran que al “deterioro estructural” se suma “la falta crónica de personal”. Todo en conjunto “afecta de manera directa a la calidad del servicio y a la salud de la población de Galapagar”, apunta Álvarez. “El Ayuntamiento no puede seguir callando ni mirando para otro lado”, asegura Pepa Álvarez.

Además, desde el PSOE galapagueño se acusa a la Comunidad de Madrid de causar un deterioro “que no es casual, es estructural y es deliberado. Responde a una estrategia conocida: desmantelar poco a poco la sanidad pública para empujar a la gente hacia seguros privados. ¿Y cómo se hace eso? No cubriendo plazas, dejando que los centros se deterioren, reduciendo plantillas y no invirtiendo en mantenimiento”.

La propuesta del PSOE exige al Gobierno regional que acometa “de forma urgente” las reformas necesarias, incluyendo la eliminación de humedades, goteras y moho en techos y paredes, y la renovación del mobiliario deteriorado en el Centro de Salud de Galapagar, “porque creemos en la sanidad pública en los profesionales que cada día trabajan en condiciones no demasiado dignas, y, sobre todo, porque creemos en el derecho de nuestros vecinos y vecinas a ser atendidos en condiciones de seguridad, calidad y respeto”, concluye Pepa Álvarez.