Tras recibir la llamada anónima, ños agentes pudieron comprobar que la descripción de la indumentaria se correspondía con cuatro individuos que trataban de acabar sus pintadas. En una caja portaban varios sprays, bocetos así como un bote de pintura blanca, que han sido incautados.
Los grafiteros han sido denunciados por una infracción a la Ordenanza Municipal de Limpieza y que según la reincidencia o la gravedad de la actuación puede conllevar sanciones desde los 300 a los 3.000 euros. Con esta última intervención, la Policía Local finaliza el mes de noviembre con 9 grafiteros denunciados, siendo una prioridad para la Concejalía de Seguridad la lucha contra el vandalismo, además de mantener la limpieza de Galapagar.