Este innovador procedimiento, que forma parte de las técnicas de ablación térmica, utiliza el frío para destruir lesiones tumorales, tanto benignas como malignas, y ha sido consensuado por el Comité de Tumores Mamarios del centro villalbino, del que forman parte especialistas en Ginecología, Oncología, Radiología y Cirugía General y Digestiva.
La crioablación es una técnica relativamente reciente que se lleva a cabo en ocasiones muy específicas debido a la estricta selección de pacientes que requiere. Tal y como explica el doctor Carlos Cárcamo, especialista del Servicio de Radiodiagnóstico del hospital villalbino, “esta técnica consiste en la ablación térmica usando frío en lesiones benignas y malignas”.
“En el caso de tumores malignos, en la actualidad se reserva exclusivamente para pacientes con cáncer de mama en quienes la cirugía está contraindicada”, añade, incidiendo en que “debe tener siempre una perspectiva multidisciplinar que se establece a través del Comité de Tumores Mamarios”.
Este procedimiento, que en España comenzó a realizarse en torno a 2019, es ambulatorio, lo que permite a la paciente regresar a su domicilio el mismo día de la intervención, ya que solo requiere de anestesia local. “La recuperación es inmediata, prácticamente sin complicaciones, y el resultado estético es excelente”, añade el doctor Cárcamo.
Desde el Hospital villalbino consideran que la crioablación “es una opción prometedora para aquellas pacientes en las que la cirugía convencional no es viable, contribuyendo así a mejorar su calidad de vida sin comprometer la eficacia y efectividad del tratamiento”.
Con su incorporación a la cartera de servicios del Hospital Universitario General de Villalba, el centro se consolida en la vanguardia regional del tratamiento percutáneo del tumor de mama con ablación térmica, reafirmando su compromiso “con la innovación y la excelencia clínica”.