Enmarcada en el Plan de Cercanías, la actuación ha movilizado inversiones por valor de 41,3 millones de euros para la renovación de la vía, estaciones, apeaderos y el túnel de Navacerrada. También se instalará una nueva catenaria (línea aérea de contacto), compatible con los trenes actuales y el nuevo material rodante que circulará por las vías.
Adif ha contratado también la instalación del Bloqueo de Liberación Automática en Vía Única (BLAU), que sustituirá al bloqueo telefónico actual. Asimismo, acaba de sacar a concurso la instalación del sistema de comunicaciones móviles GSM-R, su integración en las instalaciones comunes en Chamartín y su mantenimiento por un período de cuatro años. El GSM-R proporciona los servicios para la comunicación mediante telefonía entre las circulaciones y el puesto de mando.
Dada la naturaleza de las actuaciones, la circulación está suspendida desde el pasado mes de mayo y lo estará por plazo de un año. Las obras, explican desde Adif, se han planificado considerando la parada biológica a la que obliga la fauna protegida. La movilidad de los viajeros se garantiza con un Plan Alternativo de Transporte (PAT), programado y comunicado por Renfe.