Con esta actuación se buscaba “reducir de forma radical el impacto ambiental de la instalación, ubicada en una zona natural” y minimizar los riesgos de la línea “tanto desde el punto de vista de seguridad frente a incendios como desde el impacto sobre la fauna del entorno natural e incluso para las personas”, explican desde el Ayuntamiento. Se ha aprovechado, asimismo, para realizar una nueva canalización que permita extender la fibra óptica al Centro del Medio Ambiente La Talaverona.
“Durante los últimos años hemos puesto en marcha iniciativas para el desmontaje de líneas de cableado aéreas en diferentes puntos del municipio que poco a poco van dando sus frutos. A los trabajos de soterrado en la zona de La Marazuela y en Las Matas, que han supuesto el soterramiento de cientos de metros de cables y que continúan en marcha, se une la culminación de este proyecto, que ha eliminado las líneas y las torretas de una de las zonas naturales más emblemáticas de nuestro municipio, la Dehesa de Navalcarbón”, ha explicado el alcalde de Las Rozas, José de la Uz.
La primera fase de este proyecto supuso la realización de las canalizaciones e instalaciones subterráneas necesarias para soterrar el tendido. Después, tras recibir las autorizaciones necesarias para el desmontaje de la línea eléctrica, se procedió a desmontar las torres y sus correspondientes cables. El pasado viernes 29 de diciembre, los trabajadores municipales desmontaron la última torre; y en los próximos días se realizaran los remates finales, consistentes en adecentar las zonas donde estaban situadas la columnas para eliminar su rastro, así como retirar todos los restos del desmontaje.