Almudena Negro, alcaldesa de Torrelodones, condena los “deleznables” mensajes sobre la muerte de su padre

El comunicado íntegro que ha leído la regidora es el siguiente:

Como todo el mundo sabe mi padre, Dalmacio Negro, falleció el pasado 23 de diciembre, víspera de Nochebuena. Quienes han perdido a sus padres se pueden imaginar el dolor. Todas las familias tienen derecho al duelo. Todas sin excepción. Se dediquen los familiares a la política o a hacer encaje de bolillos.

Pues bien, debo decir que mientras que los vecinos de Torrelodones me mostraron por decenas su apoyo y pesar, lamentablemente no ha sucedido lo mismo con algunos concejales y/o grupos políticos. Me da hasta vergüenza ajena hablar de ello, porque jamás había visto comportamientos tan deleznables en el mundo político. Y digo el mundo político, porque esto no es hacer política. Es faltar el respeto a una familia en duelo. Yo no lo haría.

El mismo día en que enterraba a mi padre, Nochebuena, se estuvieron enviando mensajes a vecinos para que se echasen sobre mí y sobre el PP. El acoso siguió toda la semana y días posteriores. Yo no lo haría. El 1 de febrero Vecinos por Torrelodones publicó un mensaje en todas sus redes sociales utilizando la memoria de mi padre contra mi. Ni siquiera trabajaron mucho, puesto que el mismo mensaje lo había retuiteado yo días atrás. Yo no lo haría.

Ante estos sucesos quiero manifestar lo siguiente:

• Estos mensajes y estas acciones lo que han buscado es hacerme daño personal para tratar de desestabilizarme en lo político. Es evidente. Pues bien, a mí ni me han rozado. A quien hacen daño es a quien tal comportamiento tiene, porque es un retrato de miseria moral absoluta.
• Quien así se comporta ni entiende la democracia, ni respeta la política ni merece ser representante público. Y haré todo lo posible para devolver la dignidad a la política torrelodonense. Tienen mi palabra. Yo no lo haría.
• Los vecinos de Torrelodones, como el Grupo Popular, están muy por encima moralmente de estos comportamientos.
• Finalmente, les diré que si a mí ni me han rozado, a mi padre, un sabio y un grandísimo padre, ni les cuento. Ustedes, los mindundis que pretenden interpretarlo hasta le habrían hecho gracia por oclócratas. Y se hubiera fumado un cigarrillo.
• Lo único que tengo que decir es que yo jamás lo haría.