La Plaza de Toros de La Candelaria, en Valdemorillo, se ha llenado un año más de vehículos antiguos en la celebración del el Certamen de Coches Clásicos y Deportivos de la Sierra de Madrid que organiza, desde hace 13 años, el Club Clásicos de Valdemorillo en el marco de las fiestas en honor de la Natividad de la Virgen.
Unos 200 vehículos, entre coches y motos de todos los modelos y marcas, y una antigüedad mínima de 30 años, se dieron cita en este encuentro, que atrajo la curiosidad de cientos de visitantes. , También se pudieron ver algunas furgonetas e incluso un autobús clásico de la empresa Julián de Castro matriculado en 1934.
Entre los premiados en el Certamen de este año, el trofeo al mejor restaurado fue para un Cadillac El Dorado, mientras que el premio al vehículo mejor conservado recayó en un Corvette C2 Sting Ray descapotable. En cuanto al más elegante, el reconocimiento fue para un Imperial Le Varon de 1963, y completando este listado de premios, un Ford A de 1929 recibió el reconocimiento al coche más antiguo entre los reunidos este año.
En cuanto a las motos, una Bultaco Matador fue esta vez la merecedora del galardón a la mejor restaurada, recayendo en una Sanglas 350 el premio a la mejor conservada y el de la más elegante en una Montesa Impala. El premio a la moto más antigua fue para una Harley Davison.