1.500 kilos de carne de lidia cortada en trozos pequeños, 26 ristras de ajos, 50 arrobas de vino tinto, aceite de oliva, una mezcla secreta de especias que sólo conocen los miembros de la familia Sanz, 8.000 bollos de pan, 29 calderos de 50 kilos, 1.000 kilos de leña de encina y seis horas de cocción.