Desde el Consistorio han recordado que esta finca es “una propiedad privada, con acceso cerrado y personal de seguridad y vigilancia”, lo que significa que “acceder a ella constituye un delito”, y que la declaración de zona de caza implica que antes y durante la celebración de una cacería “debe señalizarse su celebración, indicando el día en que tendrá lugar y señalando la prohibición expresa de ingresar en la zona durante la celebración de la misma”.
Vandalismo
El Ayuntamiento ha lanzado estas recomendaciones después de que se conociera que, a mediados del mes de octubre, la propiedad denunció una nueva invasión de la finca. Fue el pasado 13 de octubre y, tras avisar a la Guardia Civil, los agentes encontraron a tres personas dentro de la propiedad, por lo que se enfrentan a una denuncia por un posible delito de daños al palacio.
No es la primera vez que se denuncian este tipo de actos vandálicos. También se han producido varias pintadas en el palacete e incluso se ha denunciado la entrada de jóvenes que se suben al tejado del edificio -que, recordemos, se encuentra muy deteriorado- para practicar parkour.