El complejo, ubicado en el Polígono P 29, cuenta con una inversión que ronda los 3,5 millones de euros y ocupa 5.500 metros cuadrados, de los que 1.600 metros cuadrados se destinaran albergar dependencias propias del servicio de limpieza en dos alturas: vestuarios, oficinas, almacenes y un taller de mantenimiento y conservación.
La zona exterior estará destinada al acomodo de la flota de maquinaria, apero y útiles y contará con un tren autónomo de lavado, surtidor de combustibles y diversas plataformas de descarga.
Todas las instalaciones estarán dotadas de las más modernas tecnologías, como climatización mediante un nuevo sistema de geotermia, apoyo de energías alternativas y recuperación de aguas pluviales.
“Hemos intentado utilizar elementos que no interfieran en el medio ambiente, que sean ecológicos”, ha explicado durante la visita el arquitecto de la empresa constructora, Amador González. “La geotermia es un método de sacar energía limpia y totalmente ecológica. No genera absolutamente nada de de huella de carbono. Por otra parte, tenemos placas solares. Sin llegar a un edificio de cero emisiones, nos estamos acercando”.
Según ha asegurado Mariola Vargas, “son unas instalaciones modernas, sostenibles y prácticas, comprometidas con el ciudadano y el medioambiente, que facilitarán el desarrollo de la actividad laboral de los casi 150 empleados del servicio de limpieza en la localidad”. Una de las novedades que incorporan es un aula en la que se podrán realizar actividades de formación y concienciación con la población escolar del municipio.
Por su parte, el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente ha explicado que en las nuevas dependencias “será posible efectuar las reparaciones, mantenimiento y conservación de la flota municipal de vehículos y maquinaria, contenedores y papeleras, así como la propia gestión integral laboral, documental y administrativa de la totalidad de las prestaciones encomendadas”.