El grupo de estudiantes se denomina Horus XV y está compuesto por Théa-Irène Bouteille, Pablo Santamaría, Inés Acerete, Omar Rojas, Miguel Ganuza y Julián González. Este año ya participaron en el concurso CanSat, puesto en marcha por la Agencia Espacial Europea. El objetivo de este certamen escolar es que los estudiantes creen un satélite del tamaño de una lata de refresco que integre todos los subsistemas principales de un satélite y que cumpla dos misiones: una principal, exigida por la ESA, que consistirá en medir la presión atmosférica y la temperatura ambiente y otra secundaria, a elegir por los alumnos, relacionada con la Agenda 2030.
Los estudiantes de Torrelodones no pasaron de la fase regional del concurso, pero ahora ya tienen la vista puesta en su nuevo proyecto para el certamen CanSat de 2025, un satélite que llevará líquenes en su interior con el objetivo de estudiar qué les sucede en el espacio. “El objetivo es estudiar las consecuencias de la exposición a condiciones ‘espaciales’, su respuesta biológica y las posibles aplicaciones en la exploración espacial”, explica Pablo Santamaría.
Horus XV tiene la posibilidad de viajar a Chicago en noviembre para participar en un evento organizado por la Asociación de Científicos Españoles en Estados Unidos (ECUSA) y presentar su proyecto. Para financiar el viaje, el grupo busca patrocinadores. Han abierto un crowdfunding a través de la web GoFundMe, cuentan con la Ayuda del Ayuntamiento de Torrelodones, pusieron un puesto de recaudación de fondos en las fiestas de la Colonia y quieren volver a ponerlo en las fiestas de agosto.
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