Cuarto aniversario

Primero vino la gestación: cómo lo haremos, cómo lo llamamos, cómo lo aceptarán… Con ilusión y arrojo. Unos meses después, tuvo un nacimiento primaveral: en abril de 2005 vio la luz el primer número de ViveTorre. Los primeros meses fueron impetuosos, frenéticos: con una frecuencia quincenal, salíamos a la calle a la búsqueda imparable de noticias, a la conquista ingeniosa de unos anunciantes que nos permitieran existir. Todo era nuevo, todo estaba por conocer. Los valientes comerciantes nos dieron su confianza y, poco a poco, fuimos dando nuestros primeros pasos más estables, nos sentimos cómodos en una periodicidad mensual, fuimos cosechando lectores... Muchas gracias a todos.

En estos cuatro años de recorrido hemos traído a nuestras páginas todo tipo de temas: la preocupación por los robos, las barreras arquitectónicas, la conciencia ecológica, las viviendas protegidas, los eventos culturales, las polémicas, las elecciones, los ocho siglos de historia, el sistema sanitario y educativo, las crisis económicas o políticas, el deporte, los aniversarios, las nuevas asociaciones, los problemas de las urbanizaciones, las fiestas…. No hemos dejado de esforzarnos por ser coherentes con nuestra independencia, por contrastar las versiones, por comprobar la veracidad de las informaciones recibidas, aunque, como todo el que aprende a caminar, también nos hemos equivocado. Al levantarnos – y reconocer nuestros errores – salimos más sabios, más prudentes.

Detrás de todos estos temas, estaban las personas que nos los transmitían: el concejal que nos habla de su compromiso, el vecino que nos expone su queja, el que nos cuenta su proyecto, el joven que ofrece un concierto, el pintor que nos muestra su cuadro, el presidente de una asociación que pide apoyo… Todos ustedes forman parte de esta revista tanto como nosotros, que nos hemos limitado a servirles de voz y de oído sin otro objetivo que reforzar los lazos de este pueblo que somos, fomentando la vecindad.

Así les presentábamos nuestro proyecto en el editorial de aquel primer número: “ViveTorre será, lectores, lo que ustedes quieran. Una nueva voz. Una herramienta al servicio del municipio”. Después de estos años en la calle, podemos afirmar con orgullo que ya nos conocen. Nosotros también les conocemos y por eso confiamos en que seguirán con nosotros hacia la madurez – participando, compartiendo, criticándonos – porque todavía nos queda mucho camino por recorrer juntos…